La vuelta al cole

Hace años que vengo pensando que debo estudiar algo más, y este jueves, con mucha ilusión empiezo osteopatia. Muchos diréis que a estas alturas, con un hijo de 6 meses,  ¡vaya jaleo! Era ahora o nunca, espero que el esfuerzo merezca la pena. Aunque llevaba tiempo dándole vueltas no me decidía y mucho menos dónde matricularme. La escuela de osteopatía de Madrid, la EFO o la Escola d’Osteopatia de Barcelona eran las tres posibilidades más viables. De las tres había oído hablar bien, de alguna había oído que no me dejara llevar por lo cuadriculados de sus profesores y de otras que no están tan bien organizadas y no siguen unos esquemas prefijados, pero la decisión la tome cuando un profesor de una de ellas me dijo que: «fuera dónde fuera que estudies, mantengas una actitud crítica y que amplíes todo lo que puedas en los libros y en la literatura medico-científica (osteopática y sobretodo no osteopática). Para estudiar osteopatía uno debe tener la mentalidad abierta pero, cómo se suele decir, no tan abierta como para que se te caiga el cerebro». Gracias a este consejo la decisión fue más fácil, el problema no era cómo ni dónde iba a recibir la formación, sino cual iba a ser mi actitud. En realidad todo depende de mi, por lo tanto me decidí por la más próxima a casa, la sede en Valencia de la Escuela de Osteopatia de Madrid.

De la osteopatia me atrae la anatomía, el conocimiento profundo de la estructura del cuerpo humano es básico. La anatomía descriptiva, características especiales de las estructuras, fisiología y neurofisiología, análisis biomecánico, patología (disfunciones), tratamientos y sobretodo diagnóstico: análisis de la postura, desequilibrios, compensaciones, dolor, examen de los reflejos, tests ortopédicos y de movilidad, etc. Se positivamente que no es la única forma de abordaje en terapia manual, como McKenzie y Neurodinámica, ni la mejor ni la más completa. Hace tiempo que he llegado a la conclusión de que hay que conocer cuantas más disciplinas mejor, y la osteopatia me atrae especialmente, así que espero que la expectativas que tengo se cumplan.

«Sin un buen diagnóstico, las técnicas y abordajes no sirven de nada»

Podemos aprender mil técnicas, mil abordajes, mil formas de tratamientos, pero si no somos capaces de realizar un buen razonamiento clínico, el tratamiento será un fracaso puesto que no estaremos trabajando el origen del problema, tan solo estaremos incidiendo en alguno de los síntomas que dicho problema presenta. Por lo tanto, no debemos perder el norte, el juicio clínico, la evidencia científica es lo que nos guía en nuestro trabajo diario como fisioterapeutas, así es como lo veo yo, y esto es lo que espero de la osteopatia, que me aporte razonamiento y nuevos conocimientos y me de herramientas para abordar las lesiones/patologías/disfunciones con mayores garantías.

Así que, de ahora en adelante, publicaré una serie de entradas dedicadas a resumir los fines de semana osteopáticos. El jueves comenzamos con el Seminario 1: Bases Metodológicas, Biomecánica, Neurofisiología Osteopática, introducción al diagnóstico y a las técnicas osteopáticas. Razonamiento clínico osteopático.

Un saludo